En esta edad, es normal que el niño hable sin parar, ya que hasta este momento ha ido adquiriendo un vocabulario que ahora comienza a utilizar para formar frases cada vez más complejas. La comunicación se vuelve por tanto, más decisiva.
Con las palabras llegan las ideas, la posibilidad de expresar emociones, conceptos y deseos. El pensamiento continúa desarrollándose de forma que el alumno ya es capaz de razonar, valorar… Esto permite al niño aprender a diferenciarse del resto, tomar conciencia de sí mismo y de los demás.
De igual forma, el niño se inicia en los » Circuitos Psicomotores» a través del juego y comienzan a asentarse los primeros hábitos de lectoescritura y autonomía personal. A través de diferentes dinámicas, juegos y técnicas, el profesorado de este aula, busca motivar la curiosidad del niño en un ambiente cálido y afectivo que permite el desarrollo positivo de la autoestima del niño.